lunes, 6 de septiembre de 2010

A la una, a las dos y a laaaas..tres. Paro de llorar. ¿No? Ah bueno, probamos otra vez entonces, a la cuenta de tres voy a dejar de llorar, no importa en qué esté pensando, no importa hace cuánto me moleste, no importa que se me acumulen las cosas, no importa que todo siga básicamente igual a antes. Y no boluda no te pongas a leer boludeces que volvés a llorar, y de paso sacá esa música deprimente de fondo que cuando escuchás la letra desde el baño te volvés a poner a llorar como una idiota en la ducha. Evitá papelones, no llorés en el bondi de nuevo, no avergüences a tu mejor amiga, ahorrále el llanto de minita empedernido a la almohada que ya fue víctima de varios. Y ya que estás en plan "cambiar las cosas" verbalizá un poco, dejá de comerte toda tu caca. ¿Listo, terminaste de llorar? ¿Alguna vez te vas a cansar de llorar, te vas a secar o algo por el estilo? Ah, que me vaya a cagar..bueno..bueno, son maneras y maneras de ver las cosas. Está bien, no te hablo más, quedate llorando sola..ah, ¿que querés compañía? sé que no estoy en posición de pedirte nada pero podrías pedírmelo bien y me quedo. Está bien, si dejás de llorar un poco me quedo, pero nada más un rato.
Como todo, como siempre me das de a ratos.

No hay comentarios: